Cuando llueve todos dicen que llueve, como cuando se sienten los primeros fríos del año que llegan sin avisar. El sábado fue uno de esos días en que el otoño empezó a calar ligero el fin de semana. El escenario que se encuentra en el interior del Centro Cultural Córdoba, es apto para un público ubicado en ciento treinta y cinco grados de circunferencia en escalinatas. Ese espacio fue sede exclusiva de un concierto cuasi íntimo: Rayos Láser, integrado por Tomás Ferrero, Cesar Seppey y Gustavo Rodríguez, nos brindaron un concierto de gala.
Con interpretaciones que salen de sus acústicos habituales, llevaron su música a otro nivel junto a Magnolia Cuarteto de Cuerdas: un grupo de cordobeses que animan a bandas, compositores y a la escena de la música argentina a retratar sus canciones con notas clásicas. En la sonoridad de los violines, la viola y el chelo sonó “una radio made in china sintoniza tu dial” y se descifraron las composiciones de Rayos Láser en las cuerdas friccionadas. Los siete músicos articularon el ritmo a través de toques de pies cada uno con su instrumento y los aplausos se adelantaron antes de llegar al final.
La última canción “Ya pasó”, selló un antes y un después en la poesía musical de la banda villameriense. La reversión de las letras en otro formato, transformó la relación entre la audiencia y los artistas despertando otros sentidos. Escuchas tradicionales, a las que no estamos acostumbrados, y que se encuentran en el umbral de la música fundidas en el pop cordobés.
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